"No se si exista un siempre, pero si existe y llega, espero que nos encuentre juntos"

viernes, 27 de junio de 2008

Gracias a Dios es viernes


Se acordarán de éste tema ochentero cantado por Lucerito, antes de que usara guardaeslpaldas para amenazar con pistola en mano a reporteros, y antes de que se casara con Mijares, y de que nos hiciera el favor de año con año derramar un par de lágrimas, para alcanzar la meta del Teletón. También viene a mi mente ese comercial de un tequila en que decía que el viernes para nosotros los mexicanos, sabe, no sabemos bien a que, pero sabe y sabe rico. Y es que el viernes tiene su encanto particular, es el día en que nos despojamos de nuestros disfraces, nos quitamos las caretas, mientras que en nuestros relojes se marcan "Las Horas Extrañas". Esas horas implican no sólo un período de tiempo, sino que también uno o varios lugares, así como otras actitudes, ropas, peinados e incluso formas de hablar.
Al caer la tarde del viernes y al llegar las "Horas Extrañas" de cada uno de nosotros, dejamos en libertad a nuestro Yo, y le damos permiso de volver a vestirse de loco, de por un momento, aprovechando que esta de moda la onda Retro, regresar unos años atrás y cargar con una realidad mas ligera; de permitirse ser simplemente. Y es que todos, creo yo, tenemos esos paraísos prohibidos, o en otros casos perdidos o abandonados en algún momento de nuestra vida, y es en esas "Horas Extrañas" que llegan en todos los rincones del mundo al final de la semana, al caer la tarde, en que nos damos permisos de explorar esos terrenos extraños en que nos encontramos de nuevo con nosotros. Para algunos esas horas extrañas transcurren en algún restaurante o bar, tomando la copa con la pareja o con algún amigo (a); otros, quizá, prefieran salir a partiar (del anglisismo Party); otros quizá encuentren en el anonimato de la noche la oportunidad para dar rienda suelta a sus identidades y preferencias ocultas y decidan que al menos por un rato no es tan malo ser uno mismo (valga decirse que nunca es tan malo ser uno); hay quien sus horas extrañas las aprovecha para simplemente quedarse en casa, ponerse su pijama de Snoopy, aplicarse algún tratamiento embellecedor y a escondidas, en su propia casa, disfrutar de escuchar los discos de Manuella Torres o quizá de realizar la reunión semanal de los doce aficionados al Necaxa.
Sea como sea, la única intención de este post es recordarles que Gracias a Dios es viernes, que no sabemos a qué sabe, pero sabe y rico, y que si tienen oportunidad de aprovechar la vida, traten de regalarse incluso a mitad de la semana una leve dosis de sus "Horas Extrañas". Y como diría el gran maestro Dehesa "Hoy Toca"
Nota: Si alguien tiene algún plan avise, sino y si alguien gusta pasar un buen rato, yo ando con ganas de ir con mi esposa a algun bar a escuchar buena música. Se ocurre Habita, Condesa DF, Celtics, Riedel Wine Bar o el clásico de clásicos HRC. Comentarios y sugerencias aquí en el blog o bien beto.primo@hotmail.com

1 comentario:

Rosa Elena Yañez dijo...

Viernes para los normales, para los oficios y empleados o jefes de trabajos cotidianos, en los que se trabaja de lunes a viernes con un horario fijo, jornada completa o partida, esos viernes que significa el fin y comienzo de algo. Para los que trabajan cuando los demás descansan, para los que trabajan en horas de servicio, trabajan cuando los demás comen, y cenan, y sus días de descanso cada semana es distinto, un viernes puede estar disfrazado de lunes, martes, o incluso viernes, sin que el sábado sea sábado ni el domingo, domingo. Saludos